Por avatares vitales que no vienen al caso, ayer domingo sin comerlo ni beberlo, lease sin intención por mi parte , me encuentro sentada en el Pabellón de Deportes en uno de los conciertos despedida de Miguel Rios .Musica compacta de este "rockero del régimen" , un artesano del rock que domina los escenarios, las luces , la puesta en escena y que a sus sesenta y tantos esta en plena forma .Los bluess y rock manidos de siempre ,eso si, bien elaboradas y mejor vendidas , envueltos por una voz de buen tono e incluso potente y una acústica que sin ser agresiva daba el ritmo justo ....... pero no es Tom Waits, Lou Reed ni Sting, en resumidas cuentas carece de genialidad .
La noche prometía tranquila al ver a un publico cincuentón" perjudicado" por los años que iba contento y abrigado ,luciendo calva y tripa cervecera sin complejos del brazo de sus señoras con bolso y falda .Y empezó el espectáculo del rock, de rigurosa chupa negra y luces apabullantes, que no movía a nadie de su asiento incluido a mi misma , gélida por el frió del aire acondicionado del pabellón y por la poca motivación artística del momento , solo me levante con la guitarra de Ariel Rot y con el "maneras de vivir de Rosendo"., la señora de mi lado izquierdo me recrimino que no la dejaba ver, así que volví a mi mutismo con gran facilidad .Y Miguel calentando al publico para que participara con frases muy del estilo de los de la "ceja" .En fin, la fiesta de despedida de su jubilación ha sido correcta , solo hubiera faltado un pequeño detalle el "reloj de regalo" que alguien del ministerio de Cultura le hubiera entregado por los servicios prestados en cincuenta años de música rock made in Spain
1 comentario:
Coincido con la descripción de este músico, que si no es exactamente genial, sí es un currante muy digno del rock.
Saludos.
Publicar un comentario